“Buscamos un Derecho de rostro humano, por eso estamos en el turno de oficio, para ayudar a quien lo necesite"

 

El bufete Ricardo Ibáñez Abogados situado en Madrid fue fundado por Ricardo Ibáñez Castresana en 1993, un profesional de la Abogacía con 28 años de ejercicio, primero en el País Vasco y luego en la capital española.

El despacho siempre ha estado enfocado a la protección del consumidor y al Derecho sanitario, pero de esa actividad inicial, pasó a ser un conocido despacho procesalista.

La Responsabilidad Civil, en especial el Derecho al honor y responsabilidad médica, es la rama del Derecho en la que se especializan. Debido a los distintos casos que ha llevado, el fundador del bufete es muy conocido en el mundo de la televisión.

Los servicios que ofrecen están orientados a la defensa integral de la empresa, defensa del consumidor en distintos macroprocesos, asesoramiento civil y defensa penal, sólo en ciertos casos.

“Nuestros aspectos distintos como despacho radica en el trato cercano y disponibilidad continua así como la especialización y discreción a precios competitivos. No podemos olvidar que hemos tenido grandes éxitos en casos famosos y relevantes y como valor añadido dominamos el proceso y entendemos los mecanismos de los medios audiovisuales”, afirman.

El equipo de trabajo de Ricardo Ibáñez Abogados lo conforman tres abogados más un grupo de becarios y secretarias. A ellos se suman colaboradores externos: peritos médicos, calígrafos y profesionales de la información. “Entre todos buscamos un Derecho de rostro humano, interpretamos que el Derecho debe ser solidario y al alcance de todos. Por eso estamos en el turno de oficio, para ayudar a gente que lo necesite”.

Entre los clientes del bufete, que se encuentran distribuidos en distintos lugares de España, principalmente Madrid y Marbella y puntualmente en Bruselas, destacan Cuarzo Producciones, diferentes personajes públicos de la televisión, la Sociedad Española de Cirugía Estética, la Sociedad Española de Medicina Estética, OCU, CECU y el grupo de empresas Gregorio Queijido, entre otros.

Entre las actividades diarias del despacho se introduce una labor que, afirman, también reforzarán de cara al futuro: “Seguir colaborando con universidades y entidades científicas, apoyar a organizaciones de consumidores y seguir innovando en materia procesal. Creemos que nos distinguimos por la sencillez, la cercanía y la formación continua. No aspiramos a ser un bufete grande, sino un gran bufete”.

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