Actualmente, atiende a más de 120 mil personas a través de una red de 320 entidades, distribuyendo en 2017 más de 17 mil kilos de alimentos, de los cuales 8.456.000 procedían de alimentos recuperados para evitar su despilfarro
El Banc dels Aliments de Barcelona (BdA) está gestionado por una fundación independiente, apolítica, aconfesional y sin ánimo de lucro, cuyo principal objetivo es recuperar los excedentes alimentarios para hacerlos llegar a personas en situación de precariedad alimentaria en su entorno.
La distribución de los alimentos no se realiza de forma directa a los usuarios, sino que se hace a través de una red de entidades y en colaboración con los diferentes agentes de ayuda social públicos y privados.
Su tarea se basa en dos valores: la sostenibilidad, reduciendo el despilfarro alimentario, y la solidaridad, redistribuyendo los excedentes a personas en situación de vulnerabilidad para contribuir a garantizar un derecho fundamental como el de la alimentación y el acceso a una dieta suficiente, segura y saludable para todos.
Otros valores intrínsecos en la labor del Banc dels Aliments son la gratuidad de los alimentos que distribuyen a las entidades; la equidad distributiva, ya que los alimentos deben llegar a toda persona que lo necesite sin exclusiones; el rigor y la eficacia en la gestión para optimizar los escasos recursos de que disponen y la sensibilización y concienciación sobre las situaciones de injusticia que se producen en nuestra sociedad, explica Roser Brutau i Basté, presidenta de la Fundació Banc dels Aliments.
Actualmente, atienden a más de 120 mil personas a través de una red de 320 entidades, en 2017 distribuyó 17.343.000 de kilos de alimentos, de los cuales 8.456.000 procedían de alimentos recuperados para evitar su despilfarro.
El Banc dels Aliments es también el impulsor de campañas masivas de recogida de alimentos como el “Gran Recapte” que implica una amplia participación ciudadana con 30 mil personas voluntarias inscritas en la pasada edición y 4.656.000 de kilos de alimentos básicos conseguidos. Este año se celebrará los días 30 de noviembre y 1 de diciembre y tiene como objetivo “contribuir en la mejora de las condiciones de vida de las personas en situación de pobreza”, afirman al mismo tiempo que agradecen a “los miles de voluntarios y voluntarias que colaboran, tanto los días de recogida como en las tareas de clasificación”.